Revista H.- 10.11.2017. El presidente de la CADE Ejecutivos 2017, Drago Kisic, ofrece su apreciación del momento económico local, y resalta la importancia de pensar el país en términos de largo plazo. La reunión empresarial más importante del país se enfocará este año en mirar el futuro y recalcar la importancia de reformas que acaben con el divorcio entre política y economía.
Drago Kisic es una presencia habitual en CADE Ejecutivos. Ya fue presidente del comité organizador en la edición de 1996 y, ahora, le toca repetir el plato. Con la presencia de diversos representantes del sector privado y altos funcionarios públicos, la edición de este año tiene como ejes principales la necesidad urgente de reformas estructurales (no solo económicas) y de reconocer y enfrentar los retos del futuro.
¿Cómo ve la situación económica del país?
La coyuntura económica pinta mucho mejor. Tenemos un buen ambiente y entusiasmo para comenzar a hacer inversiones, tanto públicas como privadas. El próximo año, claramente, la economía crecerá por encima de 4%. El asunto es ordenarnos y tener una visión de largo plazo.
¿Por qué es importante hablar del largo plazo?
Sin ese enfoque no podemos tener una visión de corto plazo y difícilmente vamos a mejorar. A los peruanos, la historia no nos une mucho, por el contrario, nos enfrenta. Hemos tenido muchos conflictos. Pero para hablar del futuro sí tiene la capacidad de unirnos, ya que permite plantear metas, ideales o desarrollos comunes. Hacer ese ejercicio es retador y estimulador. Especialmente, para los jóvenes. Ellos pueden verse empujados a trabajar por algo cuando ven que las cosas tienen un horizonte.
¿La confianza empresarial va a mejorar en los siguientes meses?
Claro que sí. Además, está comenzando, a nivel internacional, un ciclo positivo de materias primas. Eso nos ayudará.
El desarrollo de institucionalidad es otro tema donde el país está rezagado. ¿Cómo lo abordarán?
Sí. Ese tema será tocado en profundidad. Tenemos una sesión relativa a la administración de justicia, donde se contará con la presencia de representantes de todos los poderes del Estado. Además, queremos analizar la reforma educativa. En este punto revisaremos no solo la parte tecnológica, sino también el contenido. No podemos seguir con una educación que mejora a paso lento.
¿Darán un espacio a los jóvenes?
Así es. Como todos los años, el presidente de CADE Universitario participará en el evento. Estamos tratando de tener gente joven en los paneles.
¿Qué propondrán al final del evento?
Tenemos una lista de seis propuestas públicas muy contundentes -en política, educación, justicia, economía, Estado y futuro- para trabajar de acá al Bicentenario de la Independencia, a fin de que, para ese año, lleguemos en mejores condiciones. El presidente de IPAE, Julio Luque, señalará, además, cómo la organización puede contribuir a sacar adelante esas reformas.
¿Por qué sus propuestas de este año serán diferentes a las que se han lanzado en otras ediciones del evento?
Este año nos estamos enfocando en la integralidad de cada reforma. Estamos apuntando al Bicentenario y a una visión del país a 2035, para darles a los jóvenes algo sobre lo cual ilusionarse, creer y trabajar.
¿Lo que se proponga y discuta en CADE 2017 será capaz de mejorar la confianza del sector privado?
Me parece que sí. Cuando las cosas se ponen positivas, y se analizan temas asociados al futuro, las cosas pueden comenzar a acelerarse. Y esa es la expectativa y la esperanza. Es decir, que podamos retomar crecimientos del orden del 6% anual. No se trata solo de hablar del mercado, sino también de otros asuntos, como los ejes de desarrollo territorial donde el mercado aún no ha entrado.
¿Cómo cree que será CADE 2021?
Ese CADE debería cosechar todo lo se haga desde este año.